El acero inoxidable es una aleación resistente a la corrosión de hierro, cromo y, en algunos casos, níquel y otros metales.
Completa e infinitamente reciclable, el acero inoxidable es el "material verde" por excelencia. De hecho, dentro del sector de la construcción, su tasa de recuperación real es cercana al 100%. El acero inoxidable también es ambientalmente neutro e inerte, y su longevidad garantiza que satisfaga las necesidades de la construcción sostenible. Además, no filtra compuestos que puedan modificar su composición cuando entra en contacto con elementos como el agua.
Además de estos beneficios ambientales, el acero inoxidable también es estéticamente atractivo, extremadamente higiénico, fácil de mantener, altamente duradero y ofrece una amplia variedad de aspectos. Como resultado, el acero inoxidable se puede encontrar en muchos objetos cotidianos. También desempeña un papel destacado en una variedad de industrias, que incluyen energía, transporte, construcción, investigación, medicina, alimentos y logística.